El descanso y el sueño son
dos factores muy importantes en la vida de cualquier deportista. Si tenemos en
cuenta el esfuerzo que requiere
practicar deporte (y a su vez el gasto
calórico que supone el deporte para nuestro organismo) convendremos en la
importancia que cobra para cualquier deportista un buen descanso y, a su vez, un
sueño profundo. Está comprobado que practicar
deporte mejora el sueño cualitativa y cuantitativamente, pero ¿qué debe
tener en cuenta un deportista para que su sueño y su descanso sean óptimos?
Veamos algunos factores.
Favoreciendo un buen reposo
Para un deportista es importante
crear unos hábitos de entrenamiento,
de manera que el organismo se habitúe a ellos. Esto influirá en una mejor calidad del sueño. Se estima que
el cuerpo responde mejor cuando se practica deporte en horas de sol (antes de las 20.00 h.), de esta forma
seguimos nuestro reloj biológico y resulta más fácil descansar por la noche. La
melatonina es una hormona que se
segrega para reposar el organismo y
poder dormir bien: el trabajo de dicha hormona se ralentiza si hacemos
actividad física después de las 20.00 h., lo cual perjudica la calidad del
sueño. Es importante que favorezcamos la
aparición de melatonina evitando hacer trabajar al organismo fuera de las
horas de sol.
Los beneficios de un sueño profundo
A un deportista que duerme
profundamente y tiene un buen descanso le resulta más fácil fortalecer sus músculos y perder grasas que a un
deportista que no descansa bien. Esto es debido a que el sueño estimula la hormona del crecimiento (GH), una hormona muy
importante para el rendimiento de cualquier deportista, pues factores como la mineralización o la retención de calcio en los huesos son
favorecidos por el funcionamiento de esta hormona. También es fundamental que
un deportista alcance la fase REM
(de sueño profundo) para que su cuerpo
libere estrés y su mente tenga agilidad
de decisión y fortaleza, aspectos todos decisivos para rendir al 100% en
entrenamientos y competiciones.
Cuida tu sueño
Para favorecer un buen descanso hay
que cuidar el sueño: ¿has pensado si
tu dormitorio cumple con las mejores condiciones? Aíslalo de ruidos, pon en él una buena cama con un buen colchón y aléjalo de la luz. También es fundamental que las comidas que hagas antes de dormir sean ligeras para que tu
organismo no trabaje más de la cuenta y puedas dormir bien. ¡Piensa en ello!
No hay comentarios:
Publicar un comentario