Hemos cambiado de estación y para
sentir todos los colores y las
sensaciones del otoño os proponemos una visita a La Hiruela, un pequeño pueblo con poco más de cincuenta habitantes, un lugar que el viajero guarda
siempre en el recuerdo. Casi en el
límite de la Comunidad de Madrid, muy cerca de la provincia de Guadalajara,
se sitúa esta localidad rústica y
apacible que recompensa al visitante con un entorno natural único y una rica
arquitectura popular. Nuestra anterior escapada había sido siguiendo el Camino Natural de la Senda del Oso;
hoy nos vamos hasta La Hiruela para
vivir el otoño con toda su intensidad.
Una joya en la Sierra del Rincón
Ubicada al noroeste de la provincia de Madrid, a 105 kilómetros de la
capital y a tan sólo 10 km. de la provincia de Guadalajara, La Hiruela recibe al viajero con la
sensación de que el tiempo se ha
detenido. A diferencia de otras localidades de la Sierra de Madrid, La Hiruela permanece más alejada del turismo, como una
pequeña joya oculta en la cuenca del río Jarama.
Rodeada por montañas, laderas de bosques y prados,
esta villa ocupa un lugar privilegiado
en la Sierra del Rincón (declarada Reserva de la Biosfera por la UNESCO).
Resulta imposible que cualquier aficionado a la naturaleza y el senderismo no disfrute con su visita, pues el
terreno en el que se levanta este pueblo favorece el encuentro con su entorno natural y la posibilidad de practicar diferentes rutas y excursiones.
¿Qué hacer allí?
Cualquier época es buena para
visitar La Hiruela, pero en otoño su
entorno adquiere una gama de colores
irrepetibles. Naranjas, amarillos, rojos y marrones comienzan a poblar sus
montes con la llegada de esta estación, por eso nosotros recomendamos ahora su
visita.
Acercarse al mirador del pueblo
y disfrutar con las maravillosas vistas
otoñales de la sierra es un placer que no debe uno perderse. Muy cerca del
mirador, en la zona alta del pueblo, puede visitarse el Museo Etnológico, un espacio que recrea el interior de una casa tradicional y muestra las herramientas que se
usaban antiguamente para labrar la tierra. Pasear por el pueblo disfrutando de su arquitectura (sus
casas permanecen casi intactas desde su construcción y conservan todo su
encanto) y detenerse en la iglesia
barroca de San Miguel Arcángel para hacer una visita puede ser un estupendo
plan.
Los aficionados a las excursiones por el monte pueden disfrutar de diferentes rutas en las inmediaciones
del pueblo, todas ellas en un entorno sobrecogedor. Destacan cuatro rutas
importantes: Las Eras y Pila de Riego
(con abundante flora de
la zona y unas espectaculares vistas), De Molino a Molino (dirección al Cardoso de la Sierra, con frutales
característicos de la región), Los
Oficios de la Vida (naturaleza típica de la comarca en estado puro) y la Senda de la Fuente Lugar (con
diferentes árboles frutales).
Puedes ampliar información de las rutas visitando esta página web. Además, desde La Hiruela también
puede planearse una excursión al Hayedo
de Montejo (un monte
de hayas y robles con abundante flora y
fauna que hará las delicias de los amantes de la naturaleza). Las visitas al
Hayedo están restringidas, puedes encontrar más información en su web oficial.
Fotografías 01, 02 y
05: Tus Casas Naturales
Fotografías 04, 06 y
07: David Sanz
Fotografía 03:
Top Rural
No hay comentarios:
Publicar un comentario