martes, 19 de marzo de 2013

Una deportista multidisciplinar y única, una mujer fascinante

Vuelve al blog nuestra sección ¿Te acuerdas?, donde repasamos momentos importantes o personalidades históricas del deporte español. Nuestra anterior entrada había sido para Paquito Fernández Ochoa; hoy queremos dedicarle este espacio para quien fue, sin ninguna duda, una de nuestras leyendas del tenis y posiblemente la primera gran figura del deporte español. Hoy este rincón lo ocupa la gran Lili Álvarez, una mujer increíble cuya vida podría servir como guión para una novela o una producción cinematográfica.

Una mujer luchadora y polifacética
Lili Álvarez, una de las grandes estrellas del tenis mundial en los años 20, fue tres veces consecutivas finalista de Wimbledon (1926, 1927 y 1928), ganadora del doble en Roland Garros (1929), dos veces campeona de España (en individual y dobles), ganadora del Open Italiano (1930) y fue la primera deportista española en acudir a unos Juegos Olímpicos (París, 1924). Pero además de ser una excepcional tenista, Lili fue campeona de España de esquí, campeona internacional de patinaje sobre hielo, practicaba alpinismo, equitación, derrotaba a los hombres jugando al billar, venció un campeonato de baile de tango en Alemania y pilotaba coches de carreras (llegando a ganar el Circuito de Catalunya de automovilismo). Por si esto fuera poco, Lili destacó por desarrollar una gran actividad intelectual y publicó varios libros sobre feminismo, religión y deporte. También fue periodista y corresponsal del Daily Mail.


The señorita
Lili fue apodada como The Señorita por la prensa inglesa. Su elegante figura, su particular manera de entender el deporte y la vida y su gran carácter hicieron de ella una mujer admirada y mediática. En España Lili se opuso al régimen franquista y luchó en todo momento por los derechos de la mujer. Desde el principio declaró su guerra particular al machismo imperante en aquella época. En 1942, en una competición de esquí que se disputaba en Candanchú, tildó al jurado de machista por discriminar a las mujeres participantes, al hacerlas esperar mientras competían los hombres. Aquello le costaría el título y la momentánea expulsión de las competiciones oficiales de esquí, por "ofensa a España". Más adelante fue reatmitida, pero ella ya no quiso competir más de forma oficial. Es conocida una anécdota suya con un mariscal francés que, en un arrebato seductor, le dijo:
-No me atrevería a proponerle un partido de tenis a esta señorita.
A lo cual Lili respondió:
-No se preocupe mariscal. Yo tampoco le declararía a usted la guerra.


Lili murió en 1998, con 93 años de edad, en una larga vida que bien hubiera podido valer por varias.
Si, al igual que a nosotros, te ha fascinado la vida de Lili, te recomendamos encarecidamente que escuches este audio de 9 minutos donde se repasa su vida y se recogen testimonios de su propia voz.

Queremos despedir este artículo con una reflexión de la propia Lili: “A través del deporte, la sociedad ha comprendido que no es que hagamos mal lo que los hombres hacen bien, sino que tenemos otro modo de ser, otras posibilidades físicas y mentales. El deporte no es más que la expresión moderna de la feminidad. Una feminidad nueva, más amplia, más vasta en sus vistas, más consciente de ella misma, pero siempre femenina. Las mujeres podremos ser muchas cosas, pero siempre quedándonos mujeres”.

Te recordamos que si te ha gustado el artículo puedes compartirlo en Facebook haciendo clic en el "me gusta" que tienes debajo.

4 comentarios:

  1. Pues claro que me gusta y mucho, la vida de esta señorita y el excelente retrato que nos haceis de ella. Una mujer de bandera en una época en el que no era habitual ver a las féminas competir en eventos deportivos y en España prácticamente no podían hacer nada sin el consetimiento de un marido, hijo o padre, ni siquiera abrir una cuenta en un banco. Lilí fue valiente en su vida y en lo que su talento deportivo podía conseguir a otros niveles, por ejemplo, de lucha en favor de la mujer.
    Un saludo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo creo que a todos nos gusta, Lili trascendió con creces el personaje deportivo para convertirse en un ejemplo de lucha. Habría que imaginar en aquellos tiempos lo que podría significar adoptar ciertas posturas en favor de la igualdad. Una mujer muy grande! Gracias por tu valioso comentario, Carmen, como siempre. Un abrazo!

      Eliminar
  2. Por cierto, a parte de pulsar el "me gusta" es mejor compartir la biografía para aumentar el número de lectores en facebook.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pero para compartir la biografía se debe hacer desde el propio facebook, ¿verdad? ¿O se hace desde blogger? Gracias por la aclaración

      Eliminar